Susana Carranza
Comenzó como un sueño, desde hace más de 12 años, con mucha actitud y ganas de trabajar en la realización de sueños. Con un escaparate a nivel mundial listo y parejas que requerían una persona que pudiera acortar la distancia, aunado a sus acelerados ritmos de trabajo. Realmente necesitaban ayuda para realizar la boda de sus sueños.
Después creyendo que todo seria posible con el alma, corazón y pasión por delante siguiendo el gran consejo de "David Tutera" El encantador de Bodas.. "Mientras tengas esos tres puntos... lo demás simplemente llegará"; La constante preparación, y después una certificación real, con dos años de carrera para obtenerla, se comenzaron con bodas en Guanajuato y después Bodas Destino en San Miguel de Allende, Puerto Vallarta, Los Cabos y Cancún son las ciudades donde las parejas de todos los continentes y gran numero de países han confiado en Susana Carranza para Organizar su Boda Destino.. la Boda de sus Sueños.
En estos tiempos donde las parejas tienen tantas actividades profesionales, sociales, familiares y viven en un ritmo tan acelerado, el planear una Boda perfecta es algo casi imposible, por lo que una Wedding Planner realmente puede convertirse en la mejor decisión.
Estar lejos, otra ciudad, otro país, otro continente y querer regresar con los suyos a compartir ese momento tan especial, la distancia lo convierte en un estrés adicional y en ocasiones hasta irritante, en muchos casos lleva a las parejas a entrar en una tensión adicional y se requiere de una profesional con experiencia en Bodas Destino en la Ciudad donde desean unir sus vidas.
Esto y mucho más me hace entender que realmente las parejas necesitan verdadera ayuda, una cómplice neutral, que pueda generar equilibrio en la organización de la boda, darles tranquilidad durante la preparación, apoyar en ahorros de tiempo y dinero, y saber que al final será quien resuelva absolutamente todo porque será quien los acompañe en todo momento de principio a fin, para solo disfruten de su gran día.
Si a esto agrega que estoy convencida de que la parte humana, el corazón y la pasión por lo que se hace es mucho más importante, segura de que la pareja no es un número, sino dos seres humanos que decidieron caminar juntos, unir sus sueños, sus ilusiones y sentimientos para cruzar ese puente colgante, tomados de la mano, con la seguridad de que este ya fue reforzado y revisado para que puedan atravesarlo con pasos firmes y sonriendo, dispuestos a disfrutar todo lo que al otro lado les espera.
Una Wedding Planner debe ser una inversión, no un gasto, esta debe ser trabajadora, honesta y servicial, no debe ser protagonista, debe estar en todo momento cerca de la pareja para cuando la necesiten, debe saber resolver cualquier contratiempo, debe ser gentil pero con carácter, debe ser líder por naturaleza para poder guiar a un enorme y gran equipo que hará el día de su boda mágico, la constante capacitación y actualización de tendencias debe ser parte de su día a día para estar a la vanguardia en la Industria de las Bodas y lo más importante una Wedding Planner debe amar su profesión… y hacer de su trabajo su pasión.